Chapter 22
+25 Purkos
22–Nueva Normalidad
22- Nueva Normalidad
(Willa)
-Hola – Holden me saludó con un gesto de dos dedos en cuanto abrió la puerta del coche. Agradeci al
conductor y sali.
Hola, gracias por encontrarme -saludé, sabía que sonaba ansiosa.
-Está bien. El médico ya ha venido.
-Bien, ¿y…?–dejé la pregunta en el aire.
Caspien y él no han quemado nada, así que… Holden encogió los hombros. Él te pondrá al tanto cuando
subas allá.
Bueno, eso era algo.
Entramos a un edificio grande. Un bullicio de actividad resonó en cuanto entré por la puerta, parecía ser algún
tipo de centro comercial. Estaba demasiado nerviosa para prestar mucha atención.
Holden me llevó a un ascensor casi oculto, pasó una tarjeta y su dedo.
-Bastante importante –dije.
Ajustó su traje y sonrió, haciendo un gesto para que yo fuera primero.
Miré la ciudad pasar como en un sueño, pero aún me dejó sin aliento. La ciudad no parecía tan grande estando en la calle, pero ver los edificios extenderse debajo de nosotros mostraba su inmensidad.
Holden presionó otro botón y finalmente nos detuvimos en lo que tenía que ser la cima de este enorme
edificio.
-Después de ti–Holden me dejó ir primero, me gustó que no me presionara para hablar, aunque parecía ser alguien hablador.
No sabía por qué estaba tan ansiosa. Sabía que era una mezcla de que él estaba enfermo y preocupada de que se enfadara porque no lo recogí, culpable de no haberlo hecho y temerosa de que no se agradaran mutuamente.
Caspien y Emmett eran tan diferentes, y no estaba segura de por quién me preocupaba más. Tal vez ninguno de los dos le gustaría al otro.
Holden abrió la puerta a un enorme apartamento con ventanas de dos pisos. Su sala de estar abierta era más
grande que todo mi apartamento.
Escuché la risita de Emmett y me llenó de alivio. Caspien y Emmett estaban sentados en el sofá. Caspien me miró y mi corazón dio un vuelco. Llevaba una camiseta blanca sencilla que resaltaba sus músculos. Nunca lo había
visto tan informal.
-Hola me dedicó una sonrisa genuina, una de las más amplias-. Emmett no ha visto Pokémon, asi que estamos empezando desde el principio.
¡Es genial, mamá! Hay tantas mascotas diferentes dijo emocionado. Me acerqué rápidamente a él y sostuve sus mejillas sonrojadas entre mis manos.
-¿Cómo te sientes? -pregunté. Ya me sentía mejor al ver que estaba de buen ánimo y no molesto porque no estuve allí.
-Bien–respondió y frunció el ceño-. Creo. A veces me siento caliente -Me regaló una sonrisa torcida y le revolví el pelo.
-¿Qué dijo el médico? -pregunté a Caspien.
-No estaba seguro su boca se apretó en una línea delgada-. Sugirió un resfriado fuerte y le recetó algunos
22- Nueva Normalidad
+25 Punton
antibióticos. Deberían llegar pronto, por cierto.
-¿Un resfriado? -reflexioné.
Había oído hablar de cachorros que se enfermaban, pero no algo así. La mayoría de nuestras lesiones eran físicas, un hueso roto o algo así, no un resfriado común.
-Volverá mañana si está bien de repente pareció un poco preocupado.
Un destello de relámpago iluminó la habitación, seguido de un estruendo de trueno que me hizo saltar. Emmett
soltó un pequeño chillido y se acurrucó junto a Caspien. Caspien dudó por un segundo sorprendido antes de rodear a
Emmett con su brazo.
-¿Quieres agua? -preguntó Caspien cuando Emmett se incorporó un poco.
Emmett asintió y Caspien tomó una taza de la mesa con algún dibujo animado que no reconocí.
-Elección de Holden–explicó. |
-Oye, me dieron pocas instrucciones
habló Holden. Había olvidado por completo que estaba allí.
-Gracias–Lo miré-. ¿Por qué sigues parado ahí? -No se había movido desde la entrada principal.
-Esperando a ser despedido por su alteza.
Caspien rodó los ojos.
-Puedes irte.
-Tus compras están a punto de llegar dijo Holden y cruzó los brazos–¿Quieres que las descargue también?
-Eso sería genial, gracias -Caspien ignoró el sarcasmo impregnado en la pregunta de Holden.
Otro destello de relámpago iluminó el cielo y Emmett escondió su rostro en el costado de Caspien, preparándose para el trueno. Caspien apretó su brazo alrededor de él y yo tragué saliva. Al menos parecían estar lo suficientemente cómodos el uno con el otro.
-Iba a preparar algo de cena si tienes hambre -Dirigió su mirada hacia mi-. ¿Cómo te fue en tu examen?
Bastante bien, considerando todo respondi con una media sonrisa. Espero, al menos.
-Bien.
-No sabía que cocinabas.
-Tengo algunos talentos–responde.
-Esa fue la forma más modesta que jamás lo haya escuchado decir habló Holden desde otra habitación que
debía ser la cocina.
-Tienes razón. No sería propio de mí minimizar mis logros. Soy bueno en la mayoría de las cosas y en las que no soy bueno, practico hasta serlodijo y su voz no sonaba juguetona, sus ojos mostraban un nivel de sinceridad, pero no lograba entender exactamente de qué se trataba..
-Bueno, eso es muy modesto de tu parte–bromeé.
-La modestia no es algo a lo que esté acostumbrado -Hizo una pausa-. Pero estoy aprendiendo. De hecho, estoy aprendiendo muchas cosas.
Sus ojos no se apartaron de los míos.
Emmett le dio un golpecito en el pecho.
-¿Podemos seguir viendo ahora?
-Si–Caspien sonrió, una sonrisa real-. Voy a hablar con tu mamá por un minuto. ¿Vas a estar bien aquí? Emmett miró a Caspien y se detuvo antes de negar con la cabeza.
-El trueno–murmuró, luciendo avergonzado.
+25 Punto
22 – Nueva Normalidad
Pokémon con nosotros?-le sugirió Caspien.
mía.
Los ojos de Emmett se iluminaron y se volvió hacia mí.
-¿Quieres? Es muy bueno. Te mostraré mis favoritos.
-Por supuesto, cariño Tomé asiento al otro lado de ellos, tomando una de las manos de Emmett en la
Una calidez me invadió. Sentada en el apartamento de Caspien con Emmett entre nosotros y ambos pareciendo aceptarse mutuamente. Esto se sentía normal. Ver dibujos animados con ellos. Se sentía natural, incluso en este amplio ático que parecía…no estaba segura de la palabra que buscaba. Limpio, ¿tal vez?
Muy limpio. Enorme. Masivo. Espacioso – sugirió Iris.
-De acuerdo, supongo que es mi señal–habló Holden desde atrás de nosotros.
-Olvidé que estaba aquí -murmuró Caspien.
-Escuché eso dijo Holden–Y he escuchado de algunas personas que fui muy inolvidable.
Tu mamá no cuenta le grité por encima del hombro, y él tuvo la decencia de lucir ofendido. Le sonreí dulcemente.
-Buuh -fue todo lo que dijo, girando sobre sus talones-. De nada -murmuró.
-Deberías decir gracias–susurró Emmett a Caspien, y él soltó una carcajada.
-Gracias, Holden–le dijo Caspien mientras se alejaba.
-Espera un segundo – Holden volvió a entrar, revisando algo-. Perdón, solo tenía que mirar por la ventana para asegurarme de que los cerdos no estuvieran volando porque usaste buenos modales.
-¡Sal de aquí! -Caspien señaló hacia la puerta, y Holden nos lanzó una sonrisa antes de finalmente irse. Nos acomodamos en el sofá. Emmett le hizo muchas preguntas a Caspien sobre el programa. Caspien rodeó a Emmett con el brazo para colocar su mano en mi hombro, y me tranquilizó. Alcé la mano para ponerla encima de la suya y la apreté.
Emmett se quedó dormido después de que el trueno cesara, y Caspien y yo nos dirigimos a la cocina. Me preparó una taza de té y la colocó en la isla de la cocina entre nosotros.
-Quiero que te quedes esta noche -dijo inclinándose sobre la isla.
-Pero…
-El doctor está volviendo y Emmett ya eligió una habitación -dijo e hizo una pausa por un segundo como si hubiera dicho algo incorrecto-. Le dije que podía elegir una habitación por el día agregó.
-Es tan pronto.
-¿Lo es? -Levantó una ceja-. Estabas destinada a mí, y fui creado para ti.
Suspiré.
-Yo…-intente decir.
-Sí, estabas destinada a otro -Su mirada me atravesó. Pero creo que eso fue un error. Sentí algo la primera vez que te vi, aunque estuvieras emparejada con él. No sé si fue porque tu vínculo estaba a punto de romperse, quién sabe, pero no creo que estuvieras destinada a estar con él por mucho tiempo.
lo
Estuve de acuerdo. Cuanto más tiempo pasaba con Caspien, más veía los paralelismos entre mis dos parejas. Vi que era ser igual y tener a alguien que se ocupara de mí sin poseerme. Sabía desde hace tiempo que Nolan y yo no estábamos destinados a estar juntos, aunque no creo que me hubiera dado cuenta si todavía estuviera con él. Me habría acostumbrado a la sensación de vacío, de nunca sentirme vista y escuchada. De no lograr mis propios logros.
Demonios, ya me estaba acostumbrando durante el año que estuve con él.
+25 Puntos
22–Nueva Normalidad
Estaba embriagada de enamoramiento y de lo que creía que era amor, completamente cegada ante lo que realmente era nuestra relación.
-No sé por qué estabas destinada a él, Willa, de verdad que no lo sé, pero me alegra que ya no lo estés. Mis ojos se posaron en él completamente confundidos. Rara vez hablábamos de Nolan. Bueno, él rara vez lo hacía. Cada vez que se mencionaba, Caspien se ponía rigido por un segundo, pero yo lo notaba. Siempre parecía. molestarse, y sabía que era por lo que había pasado y no por alguna tontería posesiva de Alfa.
-Emmett no estaría aquí si no hubieras estado con él -Caspien pareció suavizarse y fruncí el ceño. Tenía
razón.
Fue lo único que valió la pena -admití, y él asintió. El ya lo sabía.
-Emmett es especial, es diferente. Sé que no tengo muchos hijos para compararlo, pero sé que está destinado a algo. Lo puedo sentir.
Estudié a Caspien, su mandíbula estaba tensa. Estaba completamente serio, no lo decía para complacerme. Siempre pensé que estaba destinado a algo, pero yo era su madre. Los padres siempre piensan que sus hijos son especiales.
-Estaba destinado a ser, Willa. La Diosa Luna lo quería en esta tierra por alguna razón. Es una lástima lo que tuviste que pasar para tenerlo, pero valió la pena. Nunca estuviste destinada a terminar con Nolan. Estabas destinada para mí. Pero yo no habría podido darte a Emmett.
Pensé en ello.
-Son palabras muy bonitas–dije llena de emoción.
-Lo son, y son aún más bonitas porque son ciertas -Me dio una sonrisa genuina, una de mis favoritas suyas que tenía un toque de picardía debajo.
-Tal vez tengas razón -digo de acuerdo con él.
-Tengo razón. No hay lugar para discutir. Así que quédate aquí esta noche, puedes acostar a Emmett aquí y yo conseguiré todo lo que necesite. Puse los juguetes y la ropa que Holden le compró en su habitación para que los revises. Hoy no estaba interesado en jugar.
Asentí con la cabeza y mordí mi labio.
-Di que sí, Willa. Solo una noche, además está tormentoso pidió.
– De acuerdo, dije y sus ojos se abrieron ligeramente. Solo porque está tormentoso acepté levantando las cejas y él negó con la cabeza-. Pero no puedo dormir en tu habitación.
-Lo entiendo. Puedes elegir cualquier habitación excepto la que Emmett reclamó, o puedes dormir con él.
Gracias agradeci, tiré de un mechón suelto de cabello. Por todo.
-Para eso están los compañeros, ¿verdad? Se encogió de hombros. Para ser socios, ayudarnos
mutuamente, cubrir cualquier fallo.
-Creo que podrías tener razón -respondo.
-Te dije que generalmente la tengo.
Me mostró otra de esas sonrisas y me hizo sentir un nudo en el estómago.
Diosa, quería a este hombre.
Comentarios
Sorteo Afortunado >