Rómpeme Cúrame y Olvídame novela completa

Chapter novela completa Capítulo 226



Capítulo 226 

Por este lado, los días de Trey viviendo en la casa de Melody eran claramente más tranquilos. Desde que se habían acostumbrado a los horarios entre ellos, los tres vivían como si fueran una familia. Algunas noches, cuando Melody pasaba a buscar a Eric de la escuela, aprovechaba para preparar una mesa llena de comida. Cuando Trey salía de su habitación, los encontraba a ambos sirviéndole el plato y colocándole los cubiertos, como si estuvieran esperando al padre de la casa. 

Eric incluso le gritaba: -¡Tío Trey, ven a cenar con nosotros!– 

La verdad es que Melody cocinaba delicioso, eso Trey lo había comprobado en esos días de estar comiendo y bebiendo a la buena. A veces, al verla con su delantal, moviéndose por la cocina, Trey tenía la ilusión de que había conseguido esposa. 

Pero la tranquilidad no duró mucho. Justo cuando Melody empezaba a disfrutar de esa vida tranquila con Eric, llegó un visitante inesperado. 

Ese día, al abrir la puerta, Melody se encontró con Mateo, vestido como una gran estrella y con una sonrisa que brillaba, diciendo con una voz llena de malicia, -¡Ey!– 

Su primer instinto fue cerrar la puerta en su cara, pero el hombre empujó la puerta y se coló, sonriendo de oreja a oreja, -¡Ey! Escuché que tienes a este mocoso bien controlado, ya ni puedo sacarlo a pasear- 

Eric, detrás de ella, preguntó con cuidado, -¿Señor Mateo? ¿Qué hace aquí?- En su voz había un dejo de sorpresa, al parecer el niño no tenía nada en contra de Mateo. 

Mateo se metió con todo el descaro del mundo y, mirando a Eric con una sonrisa, dijo, -Tu mamá te tiene muy escondido, ¿me extrañaste?– 

Eric miró a Melody para ver su reacción, tragó saliva y dijo, —Un… un poco, ¿creo?– 

Melody frunció el ceño y Eric se retractó al instante, -¡No, en absoluto! ¡No te extraño!– 

Mateo casi se ahoga con su propia ira. -¿Cómo puedes ser tan despiadado, chico? ¿Qué pasó c estra lucha revolucionaria?– 

Justo cuando Eric iba a decir algo, vieron a un hombre saliendo de la habitación. Era alto, de tez clara y con una cara que parecía de pocos amigos. Al ver a Mateo, Trey entrecerró los ojos y preguntó con indiferencia, -¿Y tú quién eres?– 

Esa pregunta pareció pisar el orgullo de Mateo, quien se posicionó al lado de Melody como si fueran pareja y replicó, -¿Y tú? ¿Qué hacés aquí?– 

Mateo estaba furioso. ¿Por qué estaba en casa de Melody otro hombre? ¿Y Salió de su habitación? ¿Qué relación tenían? 

ΣΕ Σ 

Mateo se giró hacía Melody, acusándola directamente, -¿Así que me estás engañando con un gigoló?— 

1/2 

20-57 

Capitulo 226 

Melody casi se ríe del absurdo. Primero irrumpe en su casa y ahora se pone a armar un escándalo como si fuera el dueño del lugar. Con una sonrisa sarcástica, le contestó, -¿Y qué si tengo un gigoló, a ti qué más te da?– 

Mateo rio con desdén, apuntando a Trey, -¿Qué tiene de bueno él?– 

Eric, con su sinceridad característica, dijo, ¡Mi tío Trey es guapo!- 

Esas palabras de “tío Trey” tomaron por sorpresa a Mateo, quien se volteó a mirar a Trey. y preguntó, -¿Eres pariente de Igor?– 

La mención de Igor cambió la expresión de Melody, quien empujó a Mateo, ¿A qué has venido? ¿A causar problemas? La próxima vez, por favor, no entres a mi casa sin ser invitado- 

Mateo pensó que Melody había crecido en astucia, su tono era más duro y su mirada podía matar. Miró a su ‘compañero revolucionario‘ Eric y dijo, -Pequeño, dijiste que me extrañabas un poco, ¿no? No será mucho pedir que me invites a comer, ¿verdad?— 

Eric miró a Melody y luego a Mateo, tartamudeando, -Yo… mi mamá es la que decide… Mateo quería agarrar al chico y zarandearlo, -¿Qué pasa? ¡El Señor Mateo, ha ayudado un montón!– 

Trey sintió que el hombre frente a él solo había ido a armar un escándalo, y sin saber cómo, soltó una carcajada sarcástica, -¿Quieres comer? Pues siéntate y come- 

Siéntate pues. 

En la cabeza de Mateo, un nervio pareció romperse con un zumbido. ¿Sentarse? Pues se sentaría, ¿acaso le tenía miedo? 

Ese hombre alto y guapo se dejó caer con un golpe seco en la silla. Del otro lado, Melody se quedó boquiabierta, -Mateo, yo… ¿acaso somos tan cercanos?- 

Si se ponían a sacar cuentas, hasta tenían cuentas viejas por arreglar. 


Tip: You can use left, right, A and D keyboard keys to browse between chapters.