Chapter Capítulo 385
Capitulo 385
Después, Evrie fue secada y llevada de vuelta a la cama, envuelta en las mantas.
Estaba agotada y cerró los ojos para dormir.
Farel se puso una bata y fue a la cocina a preparar una sopa para aliviar la resaca.
Cuando regresó, pellizcó la cara de Evrie para despertarla.
-Levántate, bébelo y luego duerme.-
Evrie abrió los ojos confundida, viendo que él sostenía un bol con una expresión seria y preocupada.
Una sensación extraña de pertenencia.
De repente preguntó–¿No me abandonarás, verdad?–
Farel se detuvo un segundo antes de responder con tres palabras.
-No lo haré.-
-Júralo.-
-Lo juro.-
Evrie miraba sus hermosos ojos, finalmente relajándose.
Farel tomó su brazo, ayudándola a sentarse.
-Abre los ojos, toma la sopa.-
Evrie obedientemente tomó el bol y lo vació de un trago.
Era tarde, después de tanta agitación.
Aún bajo los efectos del alcohol, antes de dormir murmuró que quería escuchar música.
-¿Qué quieres escuchar? Yo te pongo algo.-
–“Eres tú“.-
Ella misma sacó su celular, puso la música, se abrazó al brazo de Farel y cerró los ojos, como un pequeño gato casero dependiente.
Dentro de las mantas, su cuerpo estaba suave y su respiración se calmaba gradualmente.
Farel se recostó en la cabecera, lleno de satisfacción.
Esperó a que Evrie se durmiera.
La música seguía sonando en bucle.
Su lista de canciones estaba llena de viejos clásicos, una y otra vez, esos pocos.
Su canción favorita “Eres tú“, siempre se detenía y saltaba en el momento clave.
Porque necesitaba una suscripción, y ella no la tenía.
Farel en silencio, tomó su teléfono, desbloqueó la pantalla con facilidad y compró una suscripción anual para ella.
Este simple gesto, se convirtió en algo elegante.
Al guardar el celular, el dedo de Farel tocó accidentalmente la pantalla y la música se detuvo abruptamente.
Iba a volver a ponerla cuando un sonido sutil de un audio grabado comenzó a reproducirse.