Se Volvió Loco Tras Mi Muerte ( Violeta and Maurino )

Capítulo 51 

La luz ambiental Benaba la estancia y a lo lejos, a través del ventanal se proyectata un video en una pantalla gigante, todo estaba impregnado de los sueños de fantadia que cualquier chica deseare 

Ella parecia sacada de un cuento de hadas, como una princess disfrutando de todo a su alrededor. 

Sobre la mesa, una vela iluminaba la escena junto con sus platos favoritos de comida y un castel rosa tan alto como ella, adornado con pertas esparcidas por encima. 

Al estar viviendo todo de nuevo y saber que en su vida anterior Maurno sempre se habla esforzado en prepararle cumpleaños especiales, penso que estaría tranquila, sin emociones encontradas. 

Pero en ese momento su corazón latía con fuerza, 

Su hermano se acercó a la mesa, sacó un paquete de cigarrillos del bobilo, se sento y cruzo sus largas piernas, el humo cubría su perfil marcado y el aura fria que lo rodeaba se excandia sin disimulo. 

“¿Has preparado todo esto lo para mi?” 

Maurino preguntó: “¿Te gusta?” 

Violeta sentia un hormigueo en el cuero cabelludo al encontrarse con su mirada cuanto más serio era Maurino, más temor le provocaba, especialmente porque no habia nadie más alrededor. 

“Me… me gusta. Me encanta todo lo que me das, hermano.” 

Se acercó lentamente y se sentó. Miró el bistec delante de ella, pero en realidad no tenia hambre. 

Maurino inquirió: “No quieres comer? ¿No está tan rico como lo que prepara Adrian?” 

Violeta se sobresaltó por dentro, “No, justo me estaba dando hambre.” 

Se hizo la desentendida y pincho el bistec con el tenedor, mordió un pedazo y noto que estaba trio y duro, habla perdido su sabor caracteristico. 

En su vida anterior, cuando Maurino la mantenía y vivia cómodamente en riqueza, nabia visitado muchos restaurantes de carnes y probado muchos bistecs, se habia vuelto cada vez más exigente con sus sabores. Ahora, aunque el bistec tenia un sabor inusualmente fuerte y queria escupirlo, lo mastico y lo tragó con esfuerzo. 

Maurino sacudió la ceniza de su cigarrillo y miró fijamente a la chica frente a él,“¿Está rico?” 

Violeta no se atrevió a decir que no, “Si, está rico.” 

“Mira cómo te cuido y estuve esperándote para celebrar este dia especial contigo, pero me has decepcionado. En los ojos de Maurino se vislumbró un destello de malevolencia. 

Violeta se estremeció, sintiendo la presión familiar que la envolvia, el tenedor se le cayó de las manos. produciendo un sonido agudo y desagradable. Se levantó apresuradamente; si no fuera porque estaba constantemente en alerta, se habría arrodillado frente a Maurino. 

Su hermano podia ser muy bueno con ella, pero su deseo de control era algo que ella conocía mejor que nadie: lo que era suyo, no permitia que nadie lo tocara y mucho menos otro hombre. 

Violeta sabia que era como una mascota que el mantenía encerrada en una jaula. 

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Capitulo 51 

En su vida pasada. ¡Maurino y Adrián eran enemigos acerrimos! 

Lo 

o que más enfurecia a Maurino era verla con Adrián. 

Con las manos temblorosas y la respiración agitada, Violeta no se atrevió a mirar los fuegos artificiales que de repente iluminaron la noche; durante casi cuatro o cinco minutos, estaba demasiado asustada para disfrutarlos. La presión que sentia no la dejaba respirar y su cuerpo temblaba de miedo ante el hombre frente a ella. 

Después de fumar un cigarrillo, Maurino se apoyó cómodamente en sus rodillas, su mirada aún ardia con una intensidad que no se desvanecia, “¿No que te gustaba todo lo que preparé para ti? ¿Por qué no terminas de comer?”