Rechazada

Rechazada, pero atrapada por el Rey Alfa 

Capítulo 516 

Punto de vista de Catherine 

-Lo siento, Catherine. ¡Estamos a punto de ver a nuestra pareja!– Eva lo confirmó una vez más. 

Lo dudé. Estaba en el último piso del hotel. Incluso si Eva tenía razón, ¿cómo llegaría mi pareja hasta aquí? ¡No creía que escalara! 

Sobresaltada por mis pensamientos, salí apresuradamente de la terraza. 

Estaba a punto de tener relaciones sexuales con Blake. ¿Qué debería hacer si mi pareja apareciera aquí? 

Estaba molesta, pensando en la posibilidad de romper con Blake. 

Justo cuando estaba triste, la puerta del baño se abrió. 

Blake salió con una toalla de baño alrededor de la cintura. Luego se acercó hacia mí. 

-No deberías estar aquí. Hace frío afuera-, me dijo Blake cuando me vio en la puerta de la terraza. 

Recobré la conciencia y vi que su cuerpo todavía estaba goteando. La toalla de baño resaltaba su aura masculina por completo. 

Mi corazón latía más rápido. Luego caminé hacia él como en un trance. 

-Catherine, ¡es él! ¡Encontré a nuestra pareja!– Eva gritó emocionada en mi mente. 

Al mismo tiempo, un agradable aroma a pino y menta llegó a mi nariz. 

El olor era diferente a cualquier cosa que hubiera olido antes. 

Olía tan bien que me daba una sensación de felicidad y satisfacción. 

-¡Pareja! ¡Pareja!– Eva dijo alegremente. 

Miré hacia arriba sobresaltada. Blake, descubrí, también estaba atónito en el lugar. 

Cuando nuestros ojos se encontraron, nos vimos reflejados en los ojos del otro. 

El maravilloso aroma a madera de pino mezclado con menta persistía en mi nariz. 

De repente sentí algo que nunca había sentido antes, un deseo de estar cerca de Blake, de abrazarlo, de tenernos el uno al otro. 

La intensidad del sentimiento me sorprendió, pero al mismo tiempo, también me afectó la emoción de 

Eva. 

Los ojos de Blake también estaban llenos de emoción. 

Luego dijo suavemente: -Mío 

¡Blake era mi pareja! 

( 

A 

93% 

Capitulo 516 

Eran más de las diez de la noche cuando salimos del hotel. 

+5 Perlas 

Al principio, Blake no quería volver. Aunque estaba agotada, insistí en ir a casa, porque sabía que Hedwig me necesitaba. 

El corazón de Blake se ablandó de inmediato. Bajo la noche completamente oscura, nos apresuramos a 

casa. 

Cuando llegamos a casa, vi a la adormilada Hedwig jugando sola en la cama. 

-Mamá, ¡has vuelto! ¡Tengo mucho sueño!– Hedwig rápidamente dejó el juguete que tenía en las manos y se bajó de la cama. Abrazó mi pierna en la puerta. -Mamá, ¿a dónde fueron tú y papá? ¿Fue divertido? ¿Por qué no me llevaron? 

Me agaché, sostuve a Hedwig en mis brazos y susurré: -La próxima vez te llevaremos. Ahora déjame llevarte a la cama. 

-¿Dónde está papá? ¡Todavía no le he dado las buenas noches a papá!– Hedwig parpadeó. 

La dejé en el suelo. Corrió hacia la siguiente habitación, abrió la puerta y le dijo a Blake: -¡Papá, buenas noches! 

Blake miró el rostro bonito de Hedwig y dijo suavemente: -¡Buenas noches, cariño! 

Luego, Hedwig regresó felizmente. Se metió en la cama y se durmió. 

-Me alegra haber insistido en volver. ¡De lo contrario, Hedwig podría haber estado demasiado asustada para dormir!– bajé la voz. 

-Debería haberlo pensado. Es mi culpa-. Blake se giró y me miró tiernamente. 

Él acarició mi rostro y dijo: -Duerme bien. Debes estar cansada. 

-Tú también. Ahora hace frío. ¡Recuerda arropar a Noah por la noche!– le recordé. 

Blake respondió: -Por supuesto. He estado cuidando de él. ¡No te preocupes! 

Blake cerró suavemente la puerta. Me acosté y giré la cabeza hacia un lado. Miré el rostro dormido de Hedwig bajo la tenue luz, y mi corazón se llenó de alegría. 

La noche estaba tranquila, pero no tenía sueño en absoluto. No podía dejar de pensar en lo que acababa de suceder en el hotel. 

Todo era tan vivido. Todavía podía escuchar su respiración. 

Me sonrojé y me sentí caliente en todo el cuerpo solo de pensarlo. 

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