No Soy Tu Bien Desechable

Capítulo 927
*Parece que en mi vida pasada realmente cometi grandes errores, para terminar enseñándole todo lo que
sé a un tonto como este, pensó.
“¿Qué te pasa? ¿Te sientes mal?”
Sebastián miró a Jeronimo y dijo: “Ser tu tutor es lo que más lamento en mi vida“.
Dicho esto, Sebastián dejó atrás a Jeronimo confundido y salió por la puerta.
“Bang...
La puerta se cerró con fuerza.
Jeronimo se quedó atónito, gritando en confusión: “Pero dijiste que lo estaba haciendo bien!”
Sebastián conducia su Porsche hacia El Nido Celestial y apenas llegó al exterior del hotel, vio a Oriol parado en el frío viento.
Oriol ya se habia quitado su chaqueta de traje, incluida la corbata, y estaba dirigiendo a la compañía de remolque para que se
llevaran su auto.
Al ver a Sebastián llegar en su Porsche, Oriol sintió una opresión en el pecho.
Sebastián bajó la ventana del auto, lo miró de arriba abajo y preguntó: “Sr. Lobo, ¿esto es... mala suerte?”
Oriol, incapaz de sonreir, dijo: “Este año definitivamente tengo enemigos“.
Pascual le abrió la puerta del auto a Sebastián, diciendo: “Sr. Borrego, por favor“.
*Parqueen mi auto en el estacionamiento subterráneo. No me gustaría que me sucediera algo como esto“.
El comentario de Sebastián fue como una nueva herida en el corazón de Oriol
¿Qué gusto tenía Fernanda? ¡Ninguno de ellos era de buena calidad!
Oriol contuvo la respiración y preguntó: “Hoy, durante el banquete de compromiso, Rogelio vino a causar problemas, ¿sabias?”

Sebastián dijo: “Todos los principales medios de comunicación ya han publicado videos y fotos del evento hace quince minutos,
y con un articulo de mil palabras describieron lo que sucedió esta noche. Seria dificil para mi no saberlo“.
“¿Qué?”
Oriol sacó su teléfono, y cuando vio las noticias en línea, su cara se oscureció enormemente.
Maldito Rogelio! ¿Cómo se atrevía a publicar esto en línea?
“Jefe, voy a hacer que retiren la noticia de inmediato“.
“Después de quince minutos, la noticia ya se ha viralizado con más de diez millones de vistas, todo el país ya lo sabe! ¿De qué
sirve retirarla áhora?” Oriol, furioso, dijo: “La próxima vez que vea a Rogelio,
definitivamente le daré una lección que no olvidará!”
Sebastián miró a Oriol sin decir nada.

Realmente, a veces había que preguntarse si pensaban antes de actuar.
De repente, Oriol levantó la vista hacia Sebastián y preguntó: “Esta vez Rogelio secuestró a todos mis subordinados
desplegados en el extranjero, ¿tienes algo que decir al respecto?”
Sebastián respondió friamente: “Tampoco sé quiénes son todos tus subordinados, Sr. Lobo. No creo que,
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en un arrebato, sospeches de mi, ¿o si?”
La voz de Oriol se enfrió: “Aunque no conozcas a todos
conoces a algunos. Con tu capacidad, no sería dificil investigar, y además, la idea de mi compromiso con Ludovica fue tuya,
ahora que las cosas han salido así, es dificil no tener sospechas“.
“Así que me llamaste aquí para acusarme“.

Sebastián fingió estar en una situación dificil y dijo: “Aunque la idea fue mía, la decisión final fue tuya. Además, la familia
Borrego no tiene influencia en el extranjero, no tengo la capacidad de descubrir a tus hombres fuera del país. Finalmente, no
tengo ninguna relación con la familia Parra, si Rogelio te atacó, ¿cómo podría saberlo yo?”
Justo cuando Oriol iba a seguir preguntando, Sebastián lo interrumpió: “La familia Parra vino por tus propios errores en el
manejo de la situación con la Srta. Mercedes. No empieces a culparme por todo“.