No Soy Tu Bien Desechable

Capítulo 915
“Vale“.
El abuelo Parra asintió amablemente con la cabeza, y no fue hasta que Mercedes se alejó corriendo que el semblante del
abuelo Parra se tornó sombrio.
“Señor, he escuchado que la Señorita Ludovica ha decidido comprometerse con Oriol, y que ya muchas personas han recibido
la invitación. La señorita Mercedes claramente aún no lo sabe...”
“No dejes que se entere,” dijo el abuelo Parra, insatisfecho. “Antes pensaba que Ludovica era una buena chica, quién iba a
imaginar que haría algo así. Aunque Mercedes puede ser un poco arrogante y caprichosa, es muy sentimental. Si se entera de
que su amiga íntima se va a casar con su ex–prometido, seguro que se sentirá mal“.
“Entendido, señor. Inmediatamente haré que se controle la información para que la señorita Mercedes no se entere“.
Al otro lado, Sebastián observaba la escena desde la distancia, frunciendo el ceño.
Junto a él, Jeronimo miraba por una rendija de la puerta y preguntó: “¿Qué miras tan concentrado?”
“Nada“.
Sebastián volvió a sentarse en el sofá, y Jeronimo dijo: “Déjame decirte, cuando mi hermana se mete en algo, hasta los
fantasmas tiemblan. Tu abuela no va a aguantar, seguro que tendrá que volver corriendo a Laguna Verde esta misma noche“.
“No es eso lo que me preocupa“.
“¿Entonces qué es?”
Sebastián guardó silencio por un momento, y luego preguntó: “¿Recibiste la invitación?”
“¿Qué invitación?”
“La de compromiso de Ludovica y Oriol“.
“¿Ludovica y Oriol se van a comprometer? ¿De dónde sacaste ese chisme?”
“No es un chisme“.

“¿Cómo sabes que no es un chisme?”
“Fue idea mía“.
“¿Qué?”
Jeronimo quedó perplejo: “¿Por qué se te ocurrió una idea tan descabellada?”
“No te importa“.
“¿Cómo que no me importa, si después quieres que te ayude?”
Jeronimo siempre supo que Sebastián tenía sus mañas, pero nunca imaginó que de cien travesuras, noventa y nueve estarían
dirigidas hacia su propia familia.
“Apuesto a que Oriol no tuvo el valor de enviarles a la familia Parra la invitación, eso te da una buena excusa para ir“.
“¿Ir para qué?”
“A arruinar la fiesta“.