Niña en sus ojos Reina en su tierra

Capítulo 473
Jazmin no le dijo nada, solo llamó al mesero y le pidió que puslera las flores en el mueble de al lado.
Su celular en la mesa vibró, bajó la mirada para verlo.
Elio: Recibiste las flores? ¿Te gustaron?
Jazmin no sabia cómo responderle.
Recordaba la primera vez que Elio le había enviado flores, también eran rosas rojas.
No es que no le gustaran las flores.
Solo que las rosas rojas no le emocionaban mucho.
Pero de cualquier manera, era un bonito gesto de parte de él.
Ella le respondió por cortesía: Sí, gracias.
Elio: Acabo de ver una cafetería, ¿quieres que te traiga algo?
Jazmin: Un café con leche condensada, bien frío y con un toque de azúcar.
Elio: ¿Quieres algo de postre de Las Delicias? Puedo mandártelo ahora mismo.
Los postres de Las Delicias eran dificiles de rechazar.
Jazmin pensó un momento y le respondió: Si no es molestia, sí.
Elio le respondió al instante: Nada que sea por ti es molestia.
Jazmin sintió un vuelco en el corazón.
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¿Este hombre estaba intentando ligar con ella?
No le respondió más mensajes.

Loreto, con el rostro serio, la observó enviar el último mensaje y de pronto se levantó: “Jazmín, ven afuera un momento, tengo
que hablar contigo.”
Dicho esto, Loreto salió primero del salón privado.
Jazmín, apoyando su barbilla con una mano, tomó un sorbo de su jugo de frutas tranquilamente antes de levantarse
lentamente.
Cuando salió del salón.
Max le dio un codazo a Aragón, frunciendo el ceño: “¿Qué crees que Loreto quiera hablar con Jaz afuera? Y ese hombre que
envió las flores, ¿quién es? No me digas que es...”
Al pensar en una posibilidad, Max abrió los ojos de par en par, y sorprendido, le exclamó: “¡No me jodas, el que está tras Jaz es
Elio?”
Incluso Aragón se sorprendió: “No puede ser.”
Ellos conocían a Elio.
Era difícil creer que Elio se interesara en una chica tan joven, por muy bonita que fuera Jazmín.
Todos pensaban que Elio tenía altos estándares y que no era el tipo de hombre superficial que solo mira el exterior.
Un superdotado que siempre había sacado excelentes notas, difícilmente se fijaría en alguien que sacaba cero en los
exámenes.
Ja, ja. Abelia miró a Max un momento, sosteniendo un yogur en su mano y bebiéndolo tranquilamente, le dijo lentamente, “No
están equivocados, Elio está detrás de Jaz, y ella va a ser la Sra. Real.”
“Con lo increíble que es Jaz, solo Elio es digno de ella. ¡Ella va a casarse con mi primo!” Abelia le dijo esto mirando
directamente al Max.
¡Cualquiera que intentara robar a su futura cuñada sería su enemigo!
“¡No puedo creer que sea verdad!” Max estaba tan sorprendido que casi tira el vaso que tenía delante.
“Pero, Jaz apenas tiene dieciocho años.,

“Y qué. Elio tampoco es mucho mayor que ella, solo le lleva unos años. Cuando Jaz entre a la universidad, Elio podrá cortejarla
sin problemas.”
“Así que ciertas personas aquí, mejor que no tengan ideas indebidas sobre Jaz.”
Max se quedó en silencio.
Ya no tenía ideas indebidas sobre Jazmín.
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Ahora, Jazmín era su líder, y él solo uno de sus seguidores.
Pero, ¿Elio realmente estaba tras Jazmín?
Qué pasaría con su buen amigo Loreto entonces.
¿Será que los hermanos se enamoraron de la misma chica?
Eso era demasiado emociónante.
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No era de extrañar que Loreto pareciera molesto al saber que Elio vendría.
En el pasillo.
Jazmin salió del salón y se acercó a Loreto, observando la tensión en su mirada. Guardó el celular en su bolsillo y, con una
expresión tranquila, le preguntó: “¿Qué pasa?”