Chapter Capitulo 782
Capitulo782 — Crees que en verdad me importa? — Alejandro sentia que sus pulmones iban a explotar.
—A quién le interesa, si te importa 0 no, eso de cualquier forma no es asunto tuyo, yo por mi parte, tampoco quiero meterme en tus estipidos asuntos. Me marcho.
Clara definitivamente, vino esta noche a buscar problemas con Ema, no queria que este desgraciado hombre la molestara, solo queria salir con gran rapidez de esta habitacion.
Porque estar a solas con él en esta habitacion la hacia sentir completamente asfixiada.
Ella es una mujer muy sensible y
empatica, propensa a sentir lo que otros sienteny a emocionarse facilmente de las cosas.
Y este momento, al mirar hacia atras en los tres anos de matrimonio con Alejandro, todo lo que él le dejo fueron grandes recuerdos todos desagradables.
Ademas, fue en esta habitacién donde perdi6 para siempre su virginidad. Y este hombre, hasta el dia de hoy, ni siquiera ha recordado que alguna vez fueron marido y mujer durante toda una noche.
Bueno, es mejor realmente olvidarlo.
Algunas cosas solo causan un grave dolor al recordarlas.
Clara se levant6 rapidamente con
gracia, tratando a Alejandro como si fuera el aire, sin apartar la mirada mientras pasaba con gran agilidad frente a él.
Justo en el momento en que pasaron rozandose, la expresion facial de Alejandro se torno fria como el hielo, agarr6 bruscamente su brazo y luego con fuerza agarro su delgada espalda, presionandola contra la pared con una ferocidad casi totalmente cruel.
—ijHumm...! —Los ojos de Clara se agitaron con gran violencia, su espalda se lastimaba demasiado.
Y frente a ella, los ojos rojos del I hombre brillaban como si estuvieran sediento de pasion, eran tan hermosos y asfixiantes.
—ijAlejandro! (Estas loco...?
Lo hicimos antes? (En el pasado? \ La voz ronca y magnética de Alejandro, roz6 su suave y enrojecida oreja casi sangrante, su corazon salto de un latido, esto la sorprendio con fuerza. — Alejandro, (qué estas diciendo? —No importa. —La garganta de Alejandro se seco, sacudio de inmediato la cabeza con gran fuerza.
— Esta loco, es probable que en definitiva esta loco.
¢Como pudo hacerle una pregunta tan provocativa? Pero qué significaban esas imagenes sensuales que aparecian una y otra vez en su mente? ;A los treinta anos recién comienza a tener esos deseos?
No me sigas molestando, Alejandro.
El corazon de Clara latia con gran fuerza, pero aun asi empujaba con determinacion su pecho de acero, sus mejillas enrojecidas. —Salvaste mi vida, esta bien no quiero odiarte. Pero si vuelves a molestarme, no te mostraré ninguna piedad.
—Clara, ¢por qué me detestas tanto...” No confias en mi? —Alejandro sabia que se parecia a un hombre resentido.
Pero alguien que ama profundamente y no obtiene respuesta, poco a poco se I convierte en un resentido muy I desesperado, en un loco que pierde facilmente el control.
— Alejandro, {sabes cuanto odio estar en esta habitacion? —Clara levanto su
triste mirada, fijandose en el lujoso candelabro de cristal olocado en el techo. — Durante mas de tres anos, ha I observado ese candelabro durante mas de mil noches y dias, sonriendo con gran amargura. Cuando regreso aqui, solo recuerdo innumerables noches solitarias, solo amor no correspondido, solo un dolor desgarrador, solo tristezas en mi corazon.
Hablando en serio, deberias estar con Jimena, porque en su mundo tu eres perfecto. Pero en mi mundo, tu te has derrumbado por completo, irreparablemente.
Deseo que ambos tengamos una vida feliz en el futuro. Deseo que nuestras vidas no se crucen nunca mas.
Que no volvamos acruzarmos en nuestra vida nunca mas.
Bien, bien, Clara. Lo sé, has dicho muy bien.
Alejandro sinti6 un grave dolor tan intenso como si estuviera muriendo en ese momento, soltd lentamente la mano que la sujetaba con gran rigidez.
Las llamas de la ira ardieron en sus venas, agitandose en su pecho.
Inicialmente, queria explicar algo.
Pero de repente, se dio cuenta con gran tristeza, de que lo que Clara efectivamente queria no era ninguna explicacion. A ellano le importaba si era en verdad inocente 0 no.