¡Mamá más Suave! Papá Llora Otra vez novela completa

Capítulo 9 

Luciano fruncía el ceño profundamente, ¿qué le estaba pasando hoy a este chiquillo? 

“Solo tienes cinco años, no puedes ir en el asiento del copiloto.” Luciano se lo explicaba con toda la paciencia del mundo, “Ve y siéntate en tu silla de seguridad en la parte trasera.” 

“Qué lata.” Darío se fue al asiento trasero, resoplando. 

Verónica, que se habia sentado en el asiento del copiloto, se giró para lanzarle una sonrisa provocativa a Dario. 

Este rodó los ojos exasperado. 

Al ver a Rosalba huyendo, Einar preguntó con una expresión fría, “¿Por qué estamos huyendo?” 

“Porque nos están persiguiendo.” 

Einar mordió su labio, queriendo decir que les estaba persiguiendo porque él estaba con ella. 

Pero quería averiguar si esta persona era realmente su mamá, así que no dijo nada. 

Rosalba no estaba segura si la gente los perseguia porque Luciano la había reconocido y había enviado a alguien tras ella, o si eran las personas que acababan de secuestrar a Darito. Pero de cualquier manera, lo más importante era mantener al niño a salvo. 

Luciano ya habia empezado a sospechar de ella, asi que tenía que esconderse por un tiempo. 

“Darito, tengo que resolver unos asuntos, ¿te parece si te dejo con Leopoldo un rato?” 

“No.” La respuesta del pequeño en el asiento trasero fue bastante fría. 

Esa voz hizo que Rosalba se preguntara, desde cuándo su hijo se habia vuelto tan frio y de pocas palabras, si normalmente Darío era todo un parlanchin. 

“¿Ya no te gusta Leopoldo?” 

“No lo conozco.” Einar respondió sin pensar, y luego se rectificó rápidamente sus palabras, “No quiero alejarme de ti.” 

Rosalba vaciló, y luego de escuchar al pequeño, suspiró, “Pero realmente tengo que asegurarse de que estés seguro ahora.” 

Einar miró hacia atrás y vio que ya no los seguian, “Ahora estamos seguros.” 

Rosalba, viendo que el niño realmente no queria separarse de ella hoy, suspiro, “Está bien, entonces te llevaré de vuelta a casa.” 

Para evitar ser seguida, Rosalba dio varias vueltas antes de regresar a su hogar. 

En cuanto Einar entró al salón, sus ojos brillantes como joyas negras fueron atraídos por una foto colgada en la pared. 

La foto mostraba a un niño que se parecía mucho a él, felizmente acurrucado en los brazos de una mujer. 

Einar bajo la mirada, desilusionado, ¿realmente ella también era su madre? 

Desde que podía recordar, todos le habían dicho que no tenía mamá, que no era el hijo biológico de su papá, que era un niño abandonado y que si no fuera por su papá, sería un huérfano… 

Si realmente ella era su mama, ¿por qué no había venido a buscarlo? ¿Por qué lo había abandonado? 

Capitulo 9 

Tantas preguntas se agolpaban en su mente, sin encontrar respuestas. 

Al ver que el pequeño seguia mirando la foto, Rosalba se acercó sigilosamente y colocó su mano en el hombro del niño, ¿Qué estás mirando?” 

Rosalba solo queria bromear un poco, pero el pequeño se estremeció inesperadamente, y el marco de la foto se estrelló contra el suelo, esparciendo pedazos de vidrio por todas partes. 

Al voltearse, Einar la miraba con una expresión de pánico, como si se hubiera asustado. 

Notando la expresión anormal del pequeño, Rosalba se detuvo, preocupada, “Darito, ¿qué está pasando?” 

Einar frunció el ceño y se agachó, preparándose para recoger los pedazos de vidrio, “Lo siento, no fue a propósito.” 

Rosalba rápidamente detuvo sus movimientos, “No toques eso, cuidado con cortarte, yo lo arreglo. Ve y siéntate 

Einar se puso de pie a un lado, observándola recoger eficientemente los pedazos de vidrio. 

Einar apretó sus labios, “Lo siento…” 

“No pasa nada, hijo, pero yo ya te lo he dicho muchas veces, si se rompe un vidrio, lo mejor es que no lo toques para no lastimarte, ¿te acuerdas?” 

Einar asintió levemente, su voz todavía sonaba sin mucha emoción, “Si, me acuerdo de ello.”