Chapter Capítulo 22
Belinda.
Ya no sé que pensar con respecto a Fernando. Diego no es el ser más honesto, pero él no ganaría nada mintiendo.
No negaré que Fernando me sigue atrayendo, pero estoy a tiempo de detenerme e impedir volver a enamorarme de él. No quiero sentir nada por nadie, solo deseo concentrarme en mi hijo y mi trabajo.
El pequeño seguido me pide mi celular y ha descubierto que tengo el contacto de Fernando por ello los dos se mensajean seguido y se envían audios.
No quiero que Aarón se apegue a Fernando, pero supongo que la sangre llama
En este instante me estoy dirigiendo a la parada de autobús debido a que Diego hoy lleva a su novia al aeropuerto y por ello no puede llevarme a casa.
-¡Belinda! -Salí de mis pensamientos cuando alguien tomó mi brazo
-¿Qué quieres? -Me solté de su agarre bruscamente
-Necesito hablar contigo, explicarte lo de Jessica.—Me dice Fer
-Está todo muy claro. Jugaste con ella y le rompiste el corazón como acostumbras.
-No es así, te llevo a casa y te explico
-¡No me interesa escucharte! Creí que habías cambiado, pero sigues siendo el mismo patán y no quiero tener que ver contigo.
-Belinda
-Pierdes tu tiempo, Fernando Valencia, si piensas que soy la misma estúpida que te llevas a la cama y después desechas, estás muy equivocado. -Me solté de su agarre y cruce la puerta para llegar a la parada de autobús.
En menos de cinco minutos llegó y yo me adentre en él junto con otras dos pasajeras, pague mi boleto y proseguí buscando un asiento. Por suerte había uno disponible un poco antes de la mitad.
El vehículo comenzó a moverse de inmediato y yo me centre en mi celular el cual tiene poca batería.Le envié un mensaje a mi tío avisando que estoy en camino y comencé a husmear mis redes sociales.
Al transcurrir unos quince minutos me percaté de que el vehículo se detuvo lo cual me pareció extraño porque no llegamos a una parada y no estamos en frente de un semáforo.
-¡Muévete, imbécil! -Exclamo El chofer
Me percaté de que un carro está estacionado en frente del autobús impidiendo que este avance.
Comprendí todo cuando él entro al vehículo, cubrí mi rostro con las manos en señal de frustración.
-¡Buenas tardes, señores pasajeros! Disculpen la intromisión, pero necesito que la mujer de mi vida me escuche y no moveré mi carro hasta que ella baje conmigo.
Alguna de las mujeres lanzan suspiros y otros pasajeros le lanzan miradas asesinas.Dentro de pocos segundos él se acercó a mi lugar.
-Belinda, si no vienes conmigo, estás personas no podrán llegar a sus casas. No seas mala.
-¡Ve con él! -Me gritan al mismo tiempo
-Tengo prisa-El chofer no deja tocar la bocina
No tuve opción y debí bajar del autobús junto con él.En cuanto nos adentramos en el carro él avanzó moviéndose del camino.
-¡Esto es un secuestro!
Él ríe -Revisa el asiento trasero
En cuanto observe el asiento trasero me percaté de que allí hay un ramo de rosas y una caja de chocolates los cuales son mis favoritos.
-Ya no me gustan
-Los rellenos de fresas son tus favoritos, hermosa.
-Lo eran, estoy a punto de llamar a la policía.
-Lo eran, estoy a punto de llamar a la policía.
-¿Quieres cenar en un restaurante o te preparo algo especial en mi nuevo departamento?
-¡Estás sordo, Fernando! No cenaré contigo -Reí-Claro que torpe, quieres llevarme a tu departamento para endulzarme el oído y llevarme a la cama ¿Allí llevas a tus amantes?.
-Allí llevo a mi mujer.Parece que alguien tiene una obsesión con el sexo.-Es increíble como responde a todas mis preguntas sin quitar su vista del camino.-Puedo prometerte que no te tocaré hasta la boda.
-¿Qué boda? -Pregunto confusa
-La nuestra, Belinda. Si quieres que te pruebe que voy en serio que mejor que una boda.
-¡Estás loco!
-Estoy hablando muy en serio ¿Un mes? ¿Dos meses? Tú decides.
Rodee los ojos ante sus comentarios aunque a decir verdad no lo está diciendo en un tono burlón y su expresión es sería.
-Obviamente, la pedida oficial será más romántica. Debo pensar alguna sorpresa loca.
Rodee los ojos -No te desgastes porque nunca aceptaría ser tú esposa.
-Bien entonces quieres vivir en unión libre, no tengo ningún problema. Solo tendría que hablar con tu abuela porque sé que sin ella no te mudarías. Puedes decorar mi departamento a tu gusto o puedo comprar una casa si prefieres.
Definitivamente, este hombre está demente está haciendo planes conmigo sin consultarme. Luego dicen que las aceleradas somos las mujeres.
-No seré tu novia, tu amante, tú esposa, ni nada grábatelo.
-Serás todo eso y mucho más, Belinda.
Finalmente, acepté cenar con él en un restaurante cercano. El ordenó una de mis comidas favoritas para él y para mí.
-No debiste manejar, tu brazo todavía no está bien.
-¿A caso te preocupas por tu secuestrador?. -Él ríe burlón
-¡Muy gracioso! ¿A caso quieres que te rompa el otro brazo?.
-El doctor dijo que debo ejercitarlo aunque unos masajes tuyos me sentarían muy bien.
-Si yo te masajeo sería con martillo
-Si viene de ti sería el cielo
Mi mente repite recuerda las palabras de Diego, pero mi tonto corazón no cayó simplemente se lanzó a los brazos de Fernando. Es increíble que sea tan buen actor.
-Sus platos señor Valencia- El mesero acomoda los platillos en nuestra mesa y luego se despide.
Dentro de unos minutos comenzamos a cenar. Noto las miradas de varias personas debido a que estamos en un lugar elegante y yo estoy vestida muy casual ni siquiera estoy bien arreglada.
-No entiendo porqué me trajiste acá.
-Para que te des cuenta de que no te estoy ocultando.
-Todavía recuerdo cuando me llevabas a cualquier barsucho alegando que si alguien se enteraba de lo nuestro….
-Ya sé lo que decía, pero eso es parte del pasado. Era muy inmaduro y me dejaba influenciar por Diego y los que creía que eran mis amigos.
-Sigues siendo el mismo.
-Déjame probarte que no es así.
-No quiero hablar de lo mismo de siempre.
-Entonces te hablaré de Jessica -Comenta mientras bebe una copa de vino
-No te pedí ninguna explicación
-Te la daré de toda forma. -Él prosigue -Cuando conocí a Jessica estábamos en la facultad. En principio éramos muy buenos amigos y confidentes, para serte sincero nunca la vi como algo más, pero ella se enamoró de mí.
No sé porque siento que él está diciendo la verdad .
-Me convertí en su soporte, en su razón de vivir y eso no era sano para ninguno de los dos. Yo no podía salir a ningún lado sin que ella lo supiera o charlar con compañeras de la facultad porque corría el riesgo de que entrará en crisis. Hace algunos meses se intentó suicidar porque terminamos, luego de ello hable con ella y le pedí que iniciará el tratamiento y ella solo aceptó si volvía con ella. Fingí para que lo hiciera y decidí regresar aquí.
-Lo siento -Tome su mano y él la apretó
-Siento que es mi karma, te lastime a ti y a otras mujeres por ello decidí apoyar a Jessy para enmendar mis culpas.
-¿Cómo sabe de mí?
-Porque le hable de lo mucho que te amaba cuando éramos amigos y por otra razón que pronto sabrás.
-Sí puedo ayudarte con Jessica dime
Él lleva sus manos a mis mejillas -Eres tan hermosa y nunca me habría perdonado si algo te pasaba. ¿Le mentiste?
Negué con la cabeza
-Nunca quise dañarte de esa manera, Belinda.
-No te sientas culpable. Cuando lo intente no era yo, me sentía mal por el asunto de mi padre, por tú engañó y porque en la escuela me molestaban mucho. -Siento un nudo en la garganta al recordarlo
-¿Quiénes?
-No importa
-Por favor dime
-Mariana, Diego y sus grupos de amigos. Me llamaban fácil, zorra o aprovechada por lo que ocurrió entre nosotros. -Limpie unas lágrimas que amenazaban con salir-También tu mamá….
-¿Mi mamá que? ¡Dime Belinda! -Lo veo realmente molesto
-Ella habló con mi abuela y le dijo que yo era una chica fácil, que les coqueteaba a ti y a Diego al mismo tiempo, que tuve intimidad con los dos y con otros muchachos.Desde ese día mi abuela cambio de actitud conmigo, se tornó fría y estuvo a punto de sacarme de la escuela, yo creo que por eso me pidió que….
-¿Qué?
Me pidió que abortara porque creyó que yo era una chica fácil y ni siquiera sabía de quién era mi hijo.
Ella creyó en mí hasta que descubrió que estaba embarazada cuando nunca me había conocido un novio. En ese momento creyó en los rumores sobre mí y cambio completamente.
Me gritó que había arruinado mi vida por entregarme a cualquiera sin medir las consecuencias.
Cuando me pregunto sobre el papá del bebé yo ni siquiera pensé en decirle que se trataba de Fernando.
Me costó muchos años recuperar su confianza y su cariño.
-Belinda
-De verdad ya no quiero hablar de eso
-Perdóname mi amor -Él lleva sus manos a mis mejillas deteniendo mis lágrimas -Nunca me imagine que estabas pasando por todo eso. Nunca supe que mi madre sabía de nosotros.
-Tu familia no ha cambiado y si sigues persiguiéndome lo único que lograrás es que me corran de la empresa.
-Nunca permitiría que te alejen de mí, ya no soy un niño.
-Espero que ahora entiendas por qué nunca volvería contigo. Solo quiero paz y a tu lado nunca la tendría. – senencie antes de marcharme