Chapter capitulo 25
Capítulo 25
Taya levantó lentamente la mano y se limpió el vino tinto de la cara antes de responder débilmente: “Sí”.
Roman se inclinó un poco y la estudió con atención. “¿Cómo?”
“Sé que me parezco a la Sra. Thorin, así que una noche, mientras entregaba archivos a Alpha Knight, agregué acónito a su bebida, con la esperanza de seducirlo y hacer que se acostara conmigo. Pero no le afectó y me echó de casa inmediatamente después. Tal vez por eso me llamó sucia y tacaña”.
Sus palabras disiparon la mitad de las dudas de Roman.
Inicialmente pensó que había algún tipo de conexión sexual, o incluso romántica, entre Griffon y Taya.
Después de todo, si un hombre y una mujer se involucraban entre sí, algo así estaba destinado a suceder.
Pero no había catalogado a Taya como una trepadora social que tenía los ojos puestos en Griffon para ganarse su amor, solo para que su plan fracasara y se ganara su desdén.
Sin embargo, Roman también estaba confundido sobre sus intenciones y por qué apuntaría a Griffon.
Alpha Knight era conocida por ser inaccesible y cruel. Si buscaba lograr una mejor posición social debido a su falta
de un lobo, o si buscaba obtener dinero de alguien rico y poderoso, ¿cómo podía esta chica haber sido tan estúpida como para apuntar a Alpha Knight?
Lo único que tenía sentido era que en realidad no buscaba esas cosas y albergaba un afecto equivocado por él que nunca sería correspondido por alguien tan frío como Griffon. Taya agregó: “Siempre lo he deseado”. Había una luz tenue en sus ojos, brillando con algo parecido al amor, lo que hizo que Roman le creyera un poco. “Así que así es, ¿eh?” Con su mente tranquila por el momento, Roman levantó a Taya y la hizo sentar en su regazo. ¿Qué le importaba su amor por otra persona? No estaba buscando una pareja, no buscaba mantener a Taya cerca después de obtener lo que quería de ella. Ella no era material de pareja adecuado en primer lugar. ¿Una mujer sin lobo? Pfft. Le limpió el vino tinto de la cara y el cuello con los dedos fríos, mientras la otra mano se deslizaba por su cuerpo. —Cariño… no esperaba que fueras tan atrevida como para intentar tentar a Griffon para que se acostara contigo. Si hubiera estado en el lugar de Griffon, habría mordido el anzuelo. Diablos, ni siquiera habría necesitado que lo drogaran con acónito para follar con la deliciosa pequeña Taya.