Chapter 7
007
Raven
<<¿Cómo está la esclava herida en el vientre? ¿Podrá salvarse?»>
<<<He hecho lo que he podido, ahora solo queda que la Diosa se apiade de ella y pueda sobrevivir y si lo hace, es muy difícil que pueda concebir en el futuro, su matriz quedó destrozada»
<<Pobre, tan joven y bonita, muy difícil encontrar pareja si no puede tener cachorros>>
<<Creo que eso es lo de menos ahora, si sobrevive…será un milagro…>>
Las voces iban y venían, el dolor nunca se iba, escuchaba retazos de conversaciones, por lo que fueron días, semanas o meses, no sé.
Pero mis ganas de vivir y no morir, fueron más fuertes que todo. Mis ansias de venganza, me mantuvieron en este mundo.
“Raven” escuché finalmente un día, la voz preocupada de mi loba.
“Sena, tranquila, estoy bien, estamos viva” calmé todo su dolor y desesperación. Si yo moría, ella también lo haría.
– Agua… por favor… – los párpados me pesaban toneladas y sentía la garganta como desollada con una lija.
-¿Hay alguien…? – murmuré.
-¿Estás despierta?, ¡Hay cielos, gracias a la Diosa, creí que no lo contabas! ¡Doctor, doctor, la pequeña esclava despertó! – una mujer se me acercó y puso un poco de agua en mis labios cuarteados y
resecos.
Pasos apresurados se acercaron a mi cama y un hombre mayor comenzó a examinarme y a hablarme.
nas? – me pregunta por fin por fin.
aven a secas – rectifico porque ece que ese no es mi ido y aunque aún no me puedo llarcao Jamar Raven Centuria nunca más usaré el infame apellido peltido de mi ex manada.
uiste rescatada y estás en ta manaa alenado del “Bosque
lenza a explicarme acomodando sus en ses lentes
ta aún en muy malas condiciones, acres, asi que pasarás
asta que te puedas recuperar. De
dirás qué hacer con tu vida
+25 BONUS
Me asic
de esta
Aqui, la
*****
-¿Pud
lado mi
día.
Mis he
que trai
Sí, sí,
camisa
elegir-
lava? me aventuré a preguntar, porque nomiue habia oido
anada.
poderosas del norte, pero su lider, un Aha pure ania, tenia boisa, c
fereme y frío, aquí también había esclovos, plavos.
Aaye Aaw
denc que podías elegir. Eres libre de ine a te puedes puedese mi que mi
esquedas, tendrías que ser una esclava.
ve
-Tone Tene
blavesclaves hacen los trabajos más pesados, permis, pereche noches
denise des mata de hambre, tampoco estás ents
asdasdes labores que te manden y a cambio, teite
anadianonada con un techo y comida.
– Al mer Al m
entre
tregu
Yed
in matan anaby tampoco era como si tuviese muchashas
afuera, sinesu, sin su poder todavía y vagando sinado sim spada fácil parapara cualquier desgraciado.
El aire
Oscura
Por algu
había salva
a tan prospera spona, encontraba al Alfa que podría pouta
una esclava, despuésespues de recuperarme,
Pero había a
incluían peleal
toquetearme c
E
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aroniahárea de área de lavandería, donde toda la ropa de los nobles anada, pasalma pasaban por nuestras manos.
erarquías, estaos, estaban muy bien marcadas.
C
St
Π
la
e robarla?cbesouchescucho susurros de las otras esclavas a mi tras me concentro esclavo en lavar las ropas que me asignaron ese
as aún no se haoise curian curado al cien por ciento, pero tenía ar para comery schrew sobrevivir.
aro, la vigité mientras estats estaba entretenida y le robé una uería robar la ropa interna nenor, pero fue imposible ponerme a das rodearon a esa chica auga que saco de adentro de una no si fuese un tesoro, una cordisa carnisa blanca.
E:
m
ルヨー
CO
Si
ES
loto de oler esas feromonas e ones asta distancia, está haciendo
tro se caliente – una chica joverco even pelirroja ronroneó.
s un orden, yo soy la primera para clara quedarme con ella esta tra le arrebató la camisa a la queda que la había robado.
le
qL
is danos una olfateada, a saber los cler boscatores extras cuando la
después de usarla.
Ur
po
aron a darles tirones a la prenda, prenda.
yirajo hasta mí, una esencia fría y dominantemente, caliente a camisa era de un Alfa y de uno muy poderosonderoso.
@nazón, me hizo recordar al intimidante hombre quebre que me
adayino había vuelto a ver nunca másra mas
diaorandido a meterme en mis propios asuntos y nolos y no
luzir con otras, por una prenda masculina para na para
nacemia noche.
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Caminé despacio y fui a buscar jabón extra para terminar mi colada, solo que cuando regresé, ya la situación era otra.
-¡Fórmense todas en una fila, manos donde las pueda ver,
muévanse que es para hoy!- la voz gruesa de la loba a cargo de la Idavandería nos estremeció a todas.
Esa mujer era cruel y aunque no lo había experimentado por mí misma, había escuchado de sus castigos despiadados.
-Voy a preguntarlo una sola vez y la culpable dará un paso al frente. FFalta una de las camisas del Alfa, ¿quién la tomó? – preguntó y todas nnos tensamos, incluyéndome, porque no era culpable, pero sí
ccomplice.
Sabía muy bien quién fue, pero no era una chivata y no la delataría malentras no me perjudicara su robo, solo que aún era demasiado innocente para este mundo.
Me lo imaginé. Muchos ovarios para robar, pero no para confesar.
-EEsiddo recordaré en el castigo ¡Revisalas y sus cestas también! – les oneané a varias lobas detrás de ellas y se acercaron a nosotros que escotamos en una fila, una al lado de la otra, como prisioneras.
Una doba a platinegra se acercó a mí y comenzó a palparme rudarente portado elet cuerpo.
Cooperé porque no era culpable, solo que cuando llegó el mo de revisar la cesta con la ropa que había lavado e iba a tender,
pude creer logque sacó del fondo.
¡Era la camisa deleWifa y estaba en mis cosas!
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