Chapter Capitulo 31
Capítulo 31
Ella no entendia qué tenía Estefanía de especial, Sofia habia acumulado una deuda enorme con los Mendoza, toda la familia Mendoza odiaba a Sofia y a su hija Estefania, ¡pero Carlos siempre se
mostraba indulgente con Estefania!
Sin embargo, Carlos retiró su brazo y respondió con frialdad: “Antes de que bajen los malos comentarios en las tendencias, mejor quédate en casa para evitar malinterpretaciones de los medios. Vete a casa ya”.
“Yo…”. Fabiola se quedó sin palabras y miró como Carlos volvió a entrar en el hotel.
Fabiola todavía estaba enfadada por lo de ayer.
La razón que José le dio a Carlos fue: Con la reputación de Fabiola por los suelos después de ese escándalo, si la pusieran como la protagonista del proyecto más ambicioso de Universal Entretenimiento en una década, ¡seguro que perderían una fortuna!
Además, fue el abuelo Mendoza quien habia conseguido esa oportunidad para ella, no Carlos. Parecía que él realmente no queria involucrarse en el asunto.
Desde que Estefanía regresó, Carlos parecia cada vez menos interesado en los asuntos de ella.
Tenía que hacer algo al respecto. Como antes, tenía que hacer que Carlos volviera a fijarse en ella.
“¿No sabes cómo consiguió Estefanía esa oportunidad de actuar? Nunca la habíamos visto antes y. ¿por qué cuando apenas llegó a la compañía consiguió el guion para el tercer papel más importante? ¿No te parece extraño?”.
“Supongo que es porque es bonita, y además acaba de regresar del extranjero después de estudiar allá”. “Para nada, es siendo protegida por el presidente y está bajo el cuidado del Sr. Castillo. ¡Y ayer ella estuvo en la oficina del presidente, estuvieron solos por casi una hora! ¿Viste cómo en la comida de hoy estuvo coqueteando con el productor?”.
Carlos pasó por el baño y vio a las dos actrices principales hablando en voz baja mientras pasaban a su lado.
Momentos antes, había perdido la cabeza, incluso pensó por un instante que Estefanía podria necesitar su ayuda.
Resultó que ella estaba coqueteando a propósito.
Estefania se desmaquilló, se puso una bata de baño del hotel y sacó su celular para leer el mensaje que King le había enviado un rato antes.
“¿Necesitas dinero?”.
Estefanía lo pensó un poco y le respondió: “No”.
“Verifica el foro de hackers”. King respondió de inmediato.
En esos últimos dias Estefania había estado tan ocupada que ni habia entrado al foro. Al escuchar a King, se dio cuenta de que algo debía estar pasando y se entró directamente a “Evanescencia”.
Superficialmente, “Evanescencia” era un sitio muy serio de intercambio de segunda mano en el extranjero, pero en realidad era un foro donde se reunían hackers de todo el mundo, donde se hablaba en clave y era incomprensible para aquellos que no eran del gremio.
Capitulo 31
Ella empezó a navegar y pronto encontró una noticia en tendencia sobre ella: “Fénix se ha llevado un gran contrato de las manos de otro, ¿quién va a hacerse cargo?”.
Estefanía frunció el ceño, leyó algunos comentarios del hilo que no eran más que gente sin habilidades criticándola, Ella era conocida por ser una de las hackers con ascenso más rápido en los últimos años, prácticamente se hizo famosa de la noche a la mañana.
Todo porque había diseñado una secuencia de códigos de defensa prácticamente impecable que, una vez integrada en el sistema de seguridad, nadie habia podido romper al menos hasta ahora.
En realidad, el código inicial fue diseñado por la empresa de seguridad de King, pero tenía serias deficiencias. Después de que King la contratara, ella rápidamente corrigió esos defectos y además creó un nuevo programa capaz de contrarrestar los códigos maliciosos que intentaran atacarlo.
En resumen, el programa de defensa que diseñó podía proteger cualquier sistema y también defenderse por sí mismo, sin que otros hackers pudieran romperlo. En todo el mundo, sólo ella y King conocían el código especifico.
Eso la hizo muy famosa, de cada diez clientes, al menos siete u ocho especificaban que querian a Fénix. Pero crear esos códigos consumía mucho tiempo y energía mental, asi que Estefanía sólo aceptaba unos pocos trabajos al mes, y el que pagaba más, ganaba.
Así que ella ya era el blanco de todas las críticas en su campo, excepto por aquellos expertos que se mantenian bajo perfil y no les interesaba competir con ellos.
“¿Con cuál ojo vieron ustedes eso…?”, habia empezado a escribir unos pocos caracteres, luego lo pensó mejor y borró todo.
Discutir con esos envidiosos simplemente era una pérdida de tiempo.
Al final de cuentas, todo se debía a ese trabajo que pagaba veinte veces más de lo normal.
“Ese trabajo que paga veinte veces más fue lo que causó todo este lío, ya habia decidido no aceptarlo y devolver el anticipo”, dijo mientras enviaba un mensaje de voz a King y salia del baño. Justo en ese momento, la puerta detrás de ella chirrió.
“¿José?”, exclamó por instinto, “Pasa”.
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