Chapter Capítulo 23
Capítulo 23
Serena estaba tecleando cuando, sin darse cuenta, envió la foto. De pronto, amplió la imagen y se dio cuenta de lo transparente que era la ropa que llevaba puesta. Roclo, esa tramposa, habla elegido una prenda con transparencias donde ella no podía abrocharse bien, dejando al descubierto su esbelta y suave cintura blanca, con un diminutivo mechón de cabello caldo como un sauce.
Inmediatamente, Serena quiso borrar la foto, pero se dio cuenta de que ya era demasiado tarde. El hombre respondió con otro mensaje: “Esto es una invitación, Srta. Serena? ¿O simplemente estás alardeando?”
Serena sintió cómo sus mejillas se encendian al instante.
El tono de voz del hombre era bajo y magnético, y Serena casi podia imaginar lo seductor que sonaria si lo dijera en persona.
Con el rostro ardiendo, rápidamente escribió: “Me equivoqué, N, ¡no era para ti!”
“Si no es para mi, a quién querias mostrárselo?”, preguntó él con severidad.
Con las manos temblorosas, Serena no tuvo más remedio que enviarle las capturas de pantalla de Rocio, quien seguía afuera eligiendo ropa transparente para ella. ¿Qué te parece, Serenita? No sé cuál le gustará más a tu misterioso esposo
Ella escribió: “¡Mira, mi amiga quiere que me pruebe esto!”
El hombre respondió directamente a la pregunta de Rocio, “Todos están bien, dile a tu amiga que estoy esperando ver a la Srta. Serena con todos esos vestidos puestos.”
Serena se sonrojó aún más, pensando en quién podría resistirse a la madurez de un hombre que, incluso en su seducción, parecía tan serio y respetable
Cambio rápidamente de tema, “N, acabo de usar tu tarjeta, pero devolveré la ropa. Gracias por no bloquear la transacción mientras realizaba la compra.
Pero él, astutamente, respondió: “¿Estabas tratando de avergonzar a alguien hace un momento, verdad??”
Serena se quedó perpleja, ¿era él tan perspicaz? Sin duda, este hombre parecia tener una inteligencia y una astucia temibles.
Él respondió perezosamente: “No te preocupes por devolverlos. Es dinero para gastar, la Srta. Serena no necesita preocuparse por ahorrar.”
¿Unos cuantos cientos de miles son solo dinero para gastar? Serena sospechaba que él tenía una fortuna considerable. Quería preguntarle a qué se dedicaba, pero él parecia ocupado y de repente escribió: “Tengo que irme de viaje de negocios esta noche.”
“Vale.”
¿Eso es todo?”
¿Qué más podía decir? Serena pensó por un momento y agregó: “Que tengas un buen viaje!”
Parecia que su respuesta lo habla hecho sonreir, y con un gesto autoritario, ordenó: “Recuerda tus responsabilidades, comportate bien y cuida de nuestro bebé.”
El tono era tan imponente que casi podia sentirlo en su oido, añadiendo un toque de intimidad. Serena sostuvo su cálida mejilla y pensó para sí misma: ¿Quien te va a obedecer?
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Capitulo 21
Mejor que no estuviera, ella se encontraba más cómoda ocupándose de sus propios asuntos.
Después de que el hombre se fue, Serena no se quedó ociosa
1.อน
Aparte de bajar a comer con su suegra todos los dias, pasaba el resto del tiempo encerrada en su habitación dibujando
Elvira la llamó de repente, con una risa cálida. “Serenita, ¿Qué has estado haciendo últimamente? Mañana habrá una gala benéfica en casa, y Josefa anunciará el compromiso de tu hermana con Alexander Tu padre dice que como la hija mayor de la familia Zaldivar, debes estar presente. Celina también espera tu bendición! ¿Quieres que te envie la Invitación?”
Serena escuchó su tono apacible y no pudo evitar admirar su descaro.
¿Celina se llevó a Alexander y aún esperaba su bendición?
Y en cuanto a que Marco la obligara a volver a casa, probablemente era porque habría mucha gente importante y no quería que dijeran que maltrataba a su hija mayor.
Recordó la última vez que Marco la invitó a salir y lo que le esperaba.
El corazón de Serena se volvió tan frio como el hielo, y con desden, dijo: “¿Por qué deberia unirme a la fiesta? ¿No fue suficiente la última vez? No iré.”
Pero Elvira continuó como si no hubiera escuchado, “Serenita, no hay rencor entre padre e hija que dure más de una noche. Sé razonable, aunque siempre has estado por tu cuenta, tu padre y yo nunca te hemos abandonado. Queremos que conozcas a otros jóvenes distinguidos…”
Serena no queria seguir escuchando y estaba a punto de colgar cuando un mensaje de Rocio apareció en WhatsApp: “¡La pintura de paisaje que tu archienemigo adora se subastará mañana en la gala benéfica de la mansión Zaldivar! ¿Vas a ir?”
Serena apretó los labios friamente.
air!
Ella interrumpió a Elvira, “¡Está bien, voy a ir! Solo espero que después no te arrepientas.”
Sin darle la oportunidad para una respuesta, colgó el teléfono.
Podria bien ser una emboscada, pero si queria tener la oportunidad de fotografiar aquel paisaje, ino tenia más remedio que aventurarse!
A la tarde siguiente, Rocio apareció con una tarjeta de crédito en mano. Serena estaba en la ruina y necesitaba pedirle ayuda para la sesión fotográfica.
“Rociito, me has salvado la vida hoy.”
Rocío respondió, “¡Ay, qué formalidades! Si no hubiera sido por lo peligroso que estuvo la última vez, no estaría aqui. Además, mi amor platónico, el Sr. Navarro, podría aparecer y no voy a perder ninguna oportunidad de estar cerca de él.”
Serena, resignada, dijo, “Enamoradiza.”
Al llegar a la entrada de la mansión Zaldivar, Rocio fue detenida.
Sin embargo, le lanzó a Serena una mirada de aprobación.
Serena sabia que Rocío encontraría la manera de colarse. Ella entró tranquila, la sala de la mansión.
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Capitulo 23
Zaldivar estaba impregnada de glamour y elegancia.
Serena observaba con frialdad, apretando los puños al ver a Alexander y Celina abrazados en el balcón de la habitación nupcial. Esa misma habitación que ella había decorado, ahora estaba siendo usurpada descaradamente.
Su mirada se perdia entre la piscina, la orilla del lago, los bosques….
Todos esos eran los activos de su abuelo, la familia Zaldivar originalmente poseía solo un pequeño terreno Marco nunca fue bueno para los negocios. Cuando el grupo Zaldivar se desmoronó hace algunos años, pero gracias a los esfuerzos de Serena en el comercio, había logrado estabilizar la fortuna familiar en los últimos años.
Sin embargo, esta era la forma en que le agradecian, a ella, a su madre y a su abuelo.
“Hermana, has llegado!” Celina se acercó rodeada de la élite social.
El rumor de que Celina se casaria con la familia Falcón ya estaba en boca de todos, y la familia Falcón era una de las cuatro grandes fortunas del país. La élite social, sabiendo que Celina se elevaria en la sociedad, se apresuraban a ganar su favor.
Alguien miró a Serena con desden, “Celina, ¿cómo se atreve ella a venir?”
“Después de haber caido tan bajo, mirala, parece que no tiene ni para vestirse bien. ¿Oiste que la Srta
Serena ahora usa imitaciones?”
“Con ese carácter, menos mal que Alexander se dio cuenta a tiempo de su libertinaje, Celina, tú sí que eres la pareja ideal para él.”
Una sombra de sonrisa maliciosa cruzó los ojos de Celina, pero con una voz llena de bondad dijo. “No hablen asi, mi hermana ya está suficientemente mal. La invité hoy porque espero que todos puedan aceptarla de nuevo, darle otra oportunidad.”
“Claro que sí, Celina tiene razón.”
Elvira, junto con un grupo de damas de la alta sociedad, se acercó y tomó amablemente la mano de Serena, “La Serenita en el fondo no es mala, solo que fue un poco traviesa y cometio algunos errores. Deberiamos tratarla con bondad.”
Por favor! Solo de mirarla, temo ensuciarme los ojos, dijo una socialité con desprecio.
“Yo no puedo permitir que mi hija sea amiga de ella, Sra. Celina, por favor entiéndanos, dijo otra dama con ironia.
Celina y Elvira miraron compasivamente a Serena.
Toda la sala entera comenzó a burlarse y ridiculizar a Serena de manera aún más despiadada.
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